Los emprendimientos en época de pandemia han sido uno de los puntos mas destacados y positivos para los abogados, sin duda muchos están saliendo de la zona confort y esa dinámica expande mucho mas el mercado, permite y fomenta la creatividad, genera empleo, pero sobre todo promueve la academia. A veces me siento como en aquellas lecturas filosóficas sobre la vieja Grecia, Atenas y Roma, donde las discusiones académicas entre juristas eran el pan de cada día.
Sin embargo, hay que tener mucho cuidado, muchos colegas que no tienen experiencia en campo, que aun no saben como se sostiene una oficina física o que en el mejor de los casos acaban de terminar una especialización se les ocurrió la brillante idea de dar “clases por zoom” ¡Hágame el favor!
Sin duda una "moda" de la que hay que tener mucho cuidado, porque no solo el tiempo vale, sino que también nos puede hacer incurrir en error e incluso a los abogados mas novatos. Situación que nos molesta enormemente, en hora buena, te regalamos 5 TIPS para identificar conferencias que no vale la pena asistir:
PRIMERO: No explican de manera clara la temática y lo que se pretende con la misma. Una cosa es decir que voy hablar de un tema en particular y otra muy distinta es decir que es lo que quiero que aprendan o entiendan luego de esa explicación. Es importante tener claro si la información que van a suministrar es importante para nosotros y que ganamos con ella, de lo contrario nos embarcamos en una aventura de desperdiciar de 1 a 2 horas de nuestra vida en un monologo lleno de opiniones personales y ni que decir si es paga, que por cierto en tiempos de pandemia es mejor aprovechar ese espacio con la familia.
SEGUNDO: Panelistas o conferencistas rodeados por organizadores. Me explico mejor, una cosa es ser el organizador de la conferencia y otra salir compartiendo pantalla con el que “de verdad sabe”, simplemente para que el público los vea o su EGO sea premiado, queridos, a nosotros no nos interesa conocer que piensa alguien de un tema que ni siquiera maneja, deje que el que sepa exponga, luego abra debate o permita preguntas, pero que desastre tener a un organizador preguntando y opinando a la par del conferenciante ¿Es el expositor, es periodistas, es presentador o es narcisista? ¡Hágame el favor!
TERCERO: Pésima organización. Las conferencias que de verdad valen la pena son organizadas por profesionales, por especialistas en Marketing o mínimo por un equipo fuerte logístico, pero deja mucho que desear esas conferencias que las aplazan mas que una audiencia de Odebrecht, cuando preguntas te contestan “estamos avisando” o “valor inbox” ¿como así que están avisando? sino sabe lo que va hacer no diga nada, sin duda un detalle que dice mucho de lo profesional del equipo que los conforma.
CUARTO: Abusan de Exmagistrados y Exjueces, hay que tener cuidado con quienes son estas figuras “académicas”, sin duda la experiencia no se improvisa, pero no todo Exmagistrado necesariamente es una eminencia ni mucho menos tiene la calidad para transmitir un conocimiento valioso, seria bueno que en este tipo de situaciones se haga claridad cuáles fueron sus aportes académicos en su ejercicio, como también seria muy bueno si lograron por lo menos escribir un libro o algo por el estilo. Lo mismo aplica para aquellos conferencistas que ostentaron cargos altos en Colombia, no se deje deslumbrar por Exdirectores de entidades o Gerentes, recuerde que vivimos en país lleno de puestos otorgados por ayudas políticas o favoritismos personales, por lo menos que expliquen que hicieron en su vida profesional de relevancia para el gremio.
QUINTO: precios muy altos sin justificación. Este punto hay que hacer claridad, las reglas del libre comercio y la libertad de empresa nos permiten valorar lo que aparentemente cuesta el conocimiento, producto o servicio que prestamos, pero ¿Todo lo caro es bueno?, es un tema subjetivo y que muchas veces es motivo de abusos, si una conferencia que cumplió con los requisitos anteriores al final te entrega un certificado de formación académico por una ENTIDAD REGISTRADA EN EL MINISTERIO DE EDUCACIÓN efectivamente está en posición de cobrar Trecientos Mil pesos $300.000 en adelante, pero cuidado se dejan atrapar por CERTIFICADOS DE ASISTENCIA una trampa en la que muchos caen ¿Si en Colombia las especializaciones y las maestrías no ayudan mucho en lo laboral? Imagínate para lo que sirve un CERTIFICADO DE ASISTENCIA.
Con el perdón de muchos había que decirlo. Ahora, no todo es malo, hay muy buenas firmas ofreciendo estos servicios, incluso hay colegas de alto nivel haciendo CONVERSATORIOS muy interesantes como la firma laboralista Chapman & Asociados una de las mejores de Colombia en su canal de youtube o los que organiza Integrity LEGAL Bufete de Abogados Una reconocida firma Bogotana, que sin tanta parafernalia comparten excelente material jurídico y de interés por el amor al gremio, saludos.
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